Con esos amigos...
...para qué guerrilla y paramilitares.
Y es que ya se les fue la mano al Ejército y a la Policía. Seguramente los "incidentes" continúan en la mente de todos pero, por si las moscas, un repaso:
1. Desaparecidos del Palacio de Justicia: empleados del Palacio salen vivos y son conducidos por soldados a la Casa del Florero, desde donde el Ejército dirigía el operativo -hace 21 años no se sabe de ellos-.
2. Guaitarilla: siete policías del Gaula del Nariño y cuatro informantes mueren en un oscuro incidente protagonizado por miembros del Batallón Boyacá en Pasto.
3. Abusos: se conoce que oficiales del Ejército torturan a los soldados durante el entrenamiento que estos deben recibir para hacer parte del escuadrón contraguerrilla.
4. Jamundí: en un hecho que primero fue calificado como "fuego amigo" -qué quiere decir ese término, ¿disparar para saludar y celebrar con una amistad, como si se echaran voladores?- un pelotón del Batallón de Alta Montaña del Ejército masacra a sangre fría a todo un escuadrón antidrogas de la Policía -el más capacitado de esta institución-.
5. Prueba de violación: algunos policías, en un "golpe de astucia", deciden tenderle una trampa a un violador y grabarlo infraganti para así obtener pruebas que puedan inculparlo por acceso carnal violento y pederastia -su víctima fue una menor de edad-.
6. Montajes de atentados: todos los intentos de atentado en Bogotá, que precedieron a la segunda posesión de Uribe, y que, supuestamente, eran autoría de las Farc, contaron con la complicidad de altos mandos del Ejército -a los que el gobierno y la Fiscalía decidieron no inculpar; la razón: realizaban labores de inteligencia-.
Y falta hablar de los nexos de funcionarios del DAS -incluyendo a su ex director, hoy cónsul en Milán- con los paramilitares, y del montaje de secuestro en la costa, y del cabo tercero que se robó a una niña y la violó entre su carro, y del maltrato de miembros de la Sijín a policías bachilleres...
¿Y cuál es la solución?
¡La Justicia Penal Militar!
Ya me lo había dicho mi papá cuando en primero de bachillerato llegué a contarle que me habían aceptado en la banda de guerra del colegio: "La música militar es a la música lo que la justicia militar es a la justicia".
Descansen... !aaaaarrr!
* * *
A PROPÓSITO...
... dizque los fondos de pensiones crecieron un 4%; habrá que ver si las utilidades son para ellos o para los que, por ley, tenemos nuestros ahorros allá metidos.
Y es que ya se les fue la mano al Ejército y a la Policía. Seguramente los "incidentes" continúan en la mente de todos pero, por si las moscas, un repaso:
1. Desaparecidos del Palacio de Justicia: empleados del Palacio salen vivos y son conducidos por soldados a la Casa del Florero, desde donde el Ejército dirigía el operativo -hace 21 años no se sabe de ellos-.
2. Guaitarilla: siete policías del Gaula del Nariño y cuatro informantes mueren en un oscuro incidente protagonizado por miembros del Batallón Boyacá en Pasto.
3. Abusos: se conoce que oficiales del Ejército torturan a los soldados durante el entrenamiento que estos deben recibir para hacer parte del escuadrón contraguerrilla.
4. Jamundí: en un hecho que primero fue calificado como "fuego amigo" -qué quiere decir ese término, ¿disparar para saludar y celebrar con una amistad, como si se echaran voladores?- un pelotón del Batallón de Alta Montaña del Ejército masacra a sangre fría a todo un escuadrón antidrogas de la Policía -el más capacitado de esta institución-.
5. Prueba de violación: algunos policías, en un "golpe de astucia", deciden tenderle una trampa a un violador y grabarlo infraganti para así obtener pruebas que puedan inculparlo por acceso carnal violento y pederastia -su víctima fue una menor de edad-.
6. Montajes de atentados: todos los intentos de atentado en Bogotá, que precedieron a la segunda posesión de Uribe, y que, supuestamente, eran autoría de las Farc, contaron con la complicidad de altos mandos del Ejército -a los que el gobierno y la Fiscalía decidieron no inculpar; la razón: realizaban labores de inteligencia-.
Y falta hablar de los nexos de funcionarios del DAS -incluyendo a su ex director, hoy cónsul en Milán- con los paramilitares, y del montaje de secuestro en la costa, y del cabo tercero que se robó a una niña y la violó entre su carro, y del maltrato de miembros de la Sijín a policías bachilleres...
¿Y cuál es la solución?
¡La Justicia Penal Militar!
Ya me lo había dicho mi papá cuando en primero de bachillerato llegué a contarle que me habían aceptado en la banda de guerra del colegio: "La música militar es a la música lo que la justicia militar es a la justicia".
Descansen... !aaaaarrr!
* * *
A PROPÓSITO...
... dizque los fondos de pensiones crecieron un 4%; habrá que ver si las utilidades son para ellos o para los que, por ley, tenemos nuestros ahorros allá metidos.
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